domingo, 30 de enero de 2011

bola ocho


Bola ocho se coló sin querer en el contrario
y he perdido.
Mientras el resto rueda alrededor
de una blanca insumisa,
cojo el vaso de licor, observo
cómo escapan por las troneras
los tímidos indicios de que vuelvas
a dejarme ganar y carambola.
Comenzar otra partida ya no basta
si tengo que jugar sola,
si no cumplimos las reglas pactadas
el tiempo que te amé
Y tú me amabas.

jueves, 13 de enero de 2011

luces de ciudad

Mientras intentas desacralizar al vate y a su corte, buscando la medida exacta de la palabra, fuera de sí habita un loco que aún lucha por deslumbrarse ante el rayo oblicuo de una farola. Sin pensarlo ha conseguido que todos desvíen la mirada desde el negro de las uñas hasta la órbita de los ojos. En un momento, se cubre de luz lo imposible y se hace silencio. ¿Quién no se ha quedado absorto alguna vez mirando una estrella?

no ahora

Me obligo a comer cualquier cosa
Nunca estaré viva si me niego a alimentarme.
Si me alimentas tú estaré más muerta
Que si cojo la cuchara con la propia mano.
Dejar de comer es otra forma de suicidio,
Es haberse vencido antes del fracaso
Y si es necesario que se me pare el pulso,
Pero no ahora que lo estoy intentando.

lunes, 10 de enero de 2011

pensiones y demás

Pensiones de baño compartido,
Una pinza del pelo en las pestañas,
Lavabo o sin lavabo en el cuarto,
Maquinillas de afeitar relojes,
Hostales alejados o en el centro,
Cepillarse las caries con los dedos,
Hoteles estrellados cinco estrellas,
Con suerte hay un amigo que te deja
Dormir sobre un sofá o en sus pulgares.
También en la estación o el aeropuerto,
El caso es no quedarse a la intemperie
sin techo que mirar, cerrar los ojos
sabiendo que hace frío en otra parte.
Yo no tengo problema en adaptarme
Al ritmo del momento, ya lo sabes,
Aunque prefiera tener mucho dinero
Y hacer lo que me de la gana
Creyendo que estás cerca
Si de pronto despierto cogida de una almohada

martes, 4 de enero de 2011

pies grandes

aún teniendo los pies pequeños
puedo soportar el mismo peso que tú
pies grandes
Pulgar gordito me dice
que el hueso aguanta
los cien cañones por banda

LA PANDERETA DIJO (Primera edición)


¿Quién no ha renegado de sus musas o sus musos? (que de todo hay) por bailar la misma música que cotidianamente tocamos? La pandereta dijo es un desafío q todos los instrumentos, entre los que sobresale el ritmo familiar y desacompasado de una historia de amor no solicitada. El libro que tienes en tus manos esconde una realidad donde encuentro y deseo se van transformando en un juego de acróbatas en el que no se sabe cuándo y quién caerá primero.